En medio del conflicto
Cada uno de nosotros tenemos nuestros propios agobios, nuestros problemas diarios y cotidianos, algunos realmente graves, otros, aunque desde fuera no lo parezcan tanto, desde dentro se viven con angustia.
Es realmente difícil ponerse en los zapatos del otro.
Pero todos podemos tener una cosa en común.
Mirar al cielo desde nuestras propias circunstancias y agobios y pensar ¿Cuándo volverá el Señor?
¿cuando se cumplirá la esperanza de vivir en un mundo de verdadera paz, justicia y amor?
Porque todos necesitamos ser salvados de algo, todos necesitamos ser redimidos, renovados.